Contratar nuevos colaboradores implica tomar en cuenta varios factores. En este sentido, la personalidad podría ser uno de los más importantes para elegir al candidato correcto.
Un método apropiado con base científica para su selección es aplicarles una prueba de personalidad. De esta manera, se pueden tomar en cuenta sus habilidades, fortalezas y respuestas psicológicas a determinadas situaciones durante el proceso de selección.
Cada personalidad tiene un puesto ideal
Hay personas más adecuadas para ciertos trabajos que otras. Un empleado introvertido y analítico podría sentirse incómodo dirigiendo un equipo y tomando decisiones.
Sin embargo, un ambiente más tranquilo que vaya acorde con sus aptitudes, estimularía el potencial de
dicho empleado. Colocarlo en el lugar correcto es una oportunidad estratégica para la empresa.
La prueba DISC es un test psicológico de la personalidad utilizado para reclutar personal. Ayuda a entender la tendencia del comportamiento de la persona ante diferentes situaciones. DISC viene de las iniciales: Dominante, Influyente, Sereno y Cumplimiento. Este examen analiza qué personalidad predomina en el candidato.
Analizar la personalidad de los prospectos evita problemas a largo plazo como:
Rotación de personal
Si un empleado no se siente cómodo con su trabajo, más temprano que tarde se irá de la empresa. Tomando en cuenta los costos de contratación, el tiempo de formación al colaborador y lo que volvería a costar contratar a otra persona, es mucho más fructífero adelantarse a esta posibilidad.
Mal manejo del estrés
En momentos de crisis, mantener el enfoque es fundamental. No todas las personas están preparadas para manejar la presión que pueden generar determinadas labores. Una prueba de personalidad puede determinar la respuesta del candidato en momentos de estrés laboral para saber si puede afrontarlo
correctamente.
Errores de contratación
En este aspecto entra el equipo de reclutamiento. Al analizar la personalidad de los prospectos, toma una decisión más justa sin caer en juicios por equivocación. La información del currículum y la entrevista no permiten tomar en cuenta ciertos aspectos que una prueba de personalidad sí. Esta es una herramienta ideal para complementar el proceso de selección.
Por lo tanto, una simple prueba puede hacer la diferencia. Aunque cabe destacar que existen diferentes modelos para estos fines. Es importante elegir el más apropiado para que los resultados sean fiables y le ayuden en el proceso de selección.
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