El empleo formal en el sector privado es un pilar esencial para el desarrollo económico, especialmente en países en vías de desarrollo como la República Dominicana. Un sector privado robusto no solo proporciona empleos estables, sino que también impulsa la economía a través de la generación de ingresos, contribuciones fiscales y cotizaciones a la seguridad social. Estas cotizaciones son fundamentales para sostener el sistema de bienestar social, que a su vez mejora la calidad de vida de los ciudadanos y promueve la cohesión social. En un contexto global de incertidumbre económica y desafíos persistentes, evaluar la situación del empleo formal en la República Dominicana es crucial para diseñar políticas efectivas que fomenten el crecimiento inclusivo y sostenible.
El empleo formal tiene múltiples ventajas sobre el empleo informal, ya que brinda a los trabajadores acceso a beneficios como seguro de salud, pensiones y otras prestaciones sociales que son vitales para su bienestar y estabilidad económica a largo plazo.
Además, un sector privado formalizado y bien regulado es fundamental para la competitividad del país porque promueve la inversión, la innovación y el desarrollo tecnológico. La formalización del empleo también mejora la recaudación fiscal del Estado, permitiendo una mayor capacidad para financiar servicios públicos esenciales y proyectos de infraestructura que benefician a toda la sociedad.
En economías en desarrollo como la dominicana, donde una gran parte de la población activa se encuentra en el sector informal, es imperativo fomentar la transición hacia empleos formales. Esto no solo fortalece la economía, sino que también ayuda a reducir la pobreza y la desigualdad. Un mercado laboral formalizado es más resiliente ante crisis económicas, ya que los trabajadores y las empresas tienen una mayor protección y acceso a recursos que les permiten adaptarse y recuperarse más rápidamente.
Asimismo, la formalización del empleo contribuye a la creación de un entorno laboral más justo y equitativo, donde se respeten los derechos de los trabajadores y se promueva la igualdad de oportunidades.
En este contexto, es crucial analizar detalladamente los datos sobre el empleo formal en la República Dominicana, especialmente en lo que respecta a los cotizantes y las cotizaciones en la Tesorería de la Seguridad Social, los salarios promedio cotizables en el sector privado y las disparidades de género y sectoriales. Este análisis permitirá identificar tendencias, evaluar el impacto de las políticas actuales y proponer nuevas estrategias que promuevan la formalización y el desarrollo del empleo formal. Al hacerlo, se puede contribuir significativamente al fortalecimiento del mercado laboral y al crecimiento económico sostenible del país.
Cotizantes y cotizaciones a la Tesorería de la Seguridad Social
En abril de 2024, los datos muestran un aumento notable en el número de trabajadores cotizantes y en las cotizaciones a la Tesorería de la Seguridad Social. El número de trabajadores cotizantes era de 2,266,533, mientras que las cotizaciones alcanzaron 2,354,863. Este incremento, aunque moderado, representa una tasa de crecimiento interanual que comenzó en 6.31% en enero de 2023 y se redujo a 4.67% en abril de 2024, reflejando una desaceleración en el ritmo de crecimiento. Este comportamiento podría estar vinculado a factores económicos externos e internos, como la inflación global, la incertidumbre económica y posibles ajustes en el mercado laboral local.
El salario promedio cotizable en el sector privado también ha mostrado una tendencia ascendente significativa en abril de 2024. El salario promedio era de RD$28,996.68, con una tasa de crecimiento interanual que alcanzó el 8.13%. Este incremento salarial puede estar influenciado por varios factores, incluyendo la presión inflacionaria que obliga a los empleadores a ajustar los salarios para mantener el poder adquisitivo de los trabajadores, así como la demanda de mano de obra calificada en ciertos sectores económicos.
El aumento del salario promedio no solo refleja un ajuste necesario en el mercado laboral, sino también una señal de un entorno económico que busca adaptarse a las nuevas realidades.
Mercado laboral y género
Un análisis detallado por género revela diferencias en el salario promedio cotizable y en la cantidad de trabajadores cotizantes. En abril de 2024, las mujeres tenían un salario promedio cotizable de RD$34,706.93, ligeramente superior al de los hombres, que era de RD$34,498.33. Sin embargo, la cantidad de hombres cotizantes era mayor, con 1,226,945 en comparación con 1,078,371 mujeres. Además, la diferencia salarial, aunque pequeña, podría estar relacionada con la concentración de mujeres en sectores de mayor salario promedio o con mayores niveles de educación y capacitación en ciertas áreas.
En cuanto a los diferentes sectores económicos, los datos de abril de 2024 revelan variaciones significativas en la cantidad de trabajadores cotizantes y en el salario promedio cotizable. El sector servicios lidera en términos de empleo formal, con 1,881,866 trabajadores cotizantes y un salario promedio de RD$35,103.17. La administración pública, aunque con menos cotizantes (617,798), presenta el salario promedio más alto (RD$39,738.40), lo que sugiere una mayor estabilidad y beneficios en este sector. Sectores como comercio y otros servicios muestran competitividad en términos de salario, aunque con menor cantidad de cotizantes. En contraste, el sector de hoteles, bares y restaurantes, con 157,023 trabajadores cotizantes y un salario promedio de RD$23,179.68, refleja la necesidad de fortalecer las condiciones laborales y promover el crecimiento en este ámbito.
Perspectivas del empleo formal en RD
Las tendencias observadas en estos datos sugieren varias conexiones económicas importantes. El crecimiento del número de cotizantes y las cotizaciones refleja una expansión en la formalización del empleo, lo cual es positivo para la economía en general. Sin embargo, la desaceleración en las tasas de crecimiento podría indicar desafíos económicos que deben ser abordados con políticas adecuadas. El aumento en los salarios promedio cotizables sugiere una respuesta a la inflación y una posible mejora en la calidad del empleo, aunque también destaca la necesidad de continuar monitoreando las disparidades de género y sectoriales.
En conclusión, el análisis del empleo formal en la República Dominicana en abril de 2024 presenta un panorama de crecimiento moderado y desafíos persistentes. El aumento en el número de cotizantes y en los salarios promedio cotizables es una señal positiva, pero la desaceleración en las tasas de crecimiento y las disparidades de género y sectoriales requieren atención. Las políticas públicas deben enfocarse en continuar promoviendo la formalización del empleo, mejorar las condiciones laborales en sectores menos favorecidos y reducir las brechas de género. En particular, la simplificación de trámites para la formalización del empleo puede facilitar la incorporación de más trabajadores al sector formal. Además, es fundamental mejorar la seguridad y salud en el trabajo para garantizar condiciones laborales dignas y seguras.
Por último, el desarrollo de sectores estratégicos con alto potencial de crecimiento, como tecnología, energías renovables y turismo sostenible, puede crear más empleos de calidad y contribuir al desarrollo económico del país. Un enfoque integral que aborde estos aspectos no solo fortalecerá el mercado laboral, sino que también contribuirá a un desarrollo económico más equitativo y sostenible, asegurando que los beneficios del crecimiento económico sean compartidos por toda la sociedad.
Por Fidel Morla del Centro de Estudios Turísticos y Desarrollo Local.
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