Quizás el término burnout le resulte familiar, pero ¿conoce al boreout? Ambas se relacionan con el cansancio generado en el ambiente laboral, aunque cada una posee un origen distinto. En este artículo exploraremos las diferencias de cada una y las diferentes formas de darle solución a estos problemas.
Burnout
El síndrome de “burnout” o síndrome del trabajador quemado hace referencia al agotamiento físico, mental y emocional provocado por el estrés crónico.
Síntomas del “burnout”
A nivel físico:
- Trastornos del sueño.
- Dolores de cabeza.
- Alteraciones gastrointestinales.
A nivel emocional:
- Irritabilidad.
- Depresión.
- Ansiedad.
A nivel mental:
- Desmotivación o desinterés.
- Desidia.
- Procrastinación.
Si hacemos un zoom a los factores que detonan esta afección, encontraremos exceso de tareas, falta de control sobre el trabajo, carencia de reconocimiento por los logros, ambientes laborales demasiado exigentes y expectativas de trabajo desproporcionadas o poco claras.
Burnout
El síndrome de “burnout” o síndrome del trabajador quemado hace referencia al agotamiento físico, mental y emocional provocado por el estrés crónico.
Síntomas del “burnout”
A nivel físico:
- Dolores de cabeza frecuentes.
- Debilitamiento del sistema inmunitario y problemas de salud crónicos.
- Dificultad para dormir y ataques de insomnio.
A nivel emocional:
- Irritabilidad.
- Depresión.
- Ansiedad.
A nivel mental:
- Fatiga.
- Desmotivación o desinterés.
- Falta de concentración.
Este fenómeno se manifiesta cuando se realizan tareas repetitivas, rutinarias y poco estimulantes o retadoras durante la jornada de trabajo. Otro factor que contribuye al boreout es la sobrecualificación, ya que las tareas que se otorgan resultan demasiado sencillas. Ojo, es normal que unos días sean menos emocionantes que otros en el trabajo y eso no significa que padezca de boreout. El detalle está cuando los días aburridos se perpetúan en el tiempo.
En definitiva, “en el caso del boreout, uno se queda atrapado en su ‘zona de confort’ durante demasiado tiempo, hasta que su desarrollo personal se detiene. En el caso del burnout, se produce cuando uno permanece demasiado tiempo en su “zona de esfuerzo”, hasta que se agota toda su energía”, como sugiere el psicólogo Steve Savels.

Ya identifiqué el burnout y el boreout, ¿ahora qué hago?
Si bien es cierto que, por la naturaleza del burnout y del boreout, ambos poseen abordajes contrarios, el primer paso para superarlos es hablar con alguien, ya sea un amigo, familiar, compañero de trabajo, jefe, incluso un profesional de la salud mental.
Estrategias para superar el burnout:
- Establezca horarios más sostenibles y respete sus tiempos de descanso, comidas, pausas y sueño.
- Aprenda a decir “no” cuando algo comprometa su equilibrio personal.
- Realice tareas complejas cuando tenga más energía y deje tareas más automáticas para los momentos en que se sienta más cansado.
- Practique técnicas de mindfulness.
- Solicite la redistribución de la carga laboral.
Estrategias para superar el boreout:
- Explore otros departamentos dentro de la empresa con el trabajo en la sombra.
- Inicie pequeñas iniciativas que aporten valor: mejora de procesos, actualización de documentos, organización de recursos compartidos, etc.
- Inicie o súmese a iniciativas de bienestar o clima laboral.
- Aproveche el tiempo “ocioso” para formarse: cursos en línea, talleres, libros, mentorías.
- Si el entorno no ofrece posibilidades de crecimiento ni sentido, tal vez sea momento de explorar otras oportunidades laborales.
Le pudiera interesar: Gestione las reseñas de Google de su negocio como un profesional con estas cinco estrategias.